Cuando la nariz esta taponada, es necesario respirar por la boca, por lo que se reseca la garganta y se facilita la entrada de gérmenes. Por eso, suele ser frecuente presentar irritación o infección de garganta después de presentar congestión nasal.
Antes de tratar la congestión nasal, conviene conocer la causa. Si la congestión nasal se debe a alergia, podemos tomar un antihistamínico por vía oral y/o nasal, mientras que si es producida por un virus (gripe, resfriado, etc.) podemos aliviar los síntomas con un descongestivo nasal, también por vía oral o tópica.
Los descongestivos nasales tópicos (oximetazolina, xilometazolina, nafazolina) se encuentran en forma de spray o gotas nasales, son muy efectivos y tienen un efecto inmediato. Estan contraindicados en caso de enfermedad del corazón, hipertensión, hipertiroidismo y diabetes. Pueden interaccionar con algunos medicamentos, por lo que si es el caso, consultaremos con nuestro farmacéutico. No deben emplearse durante más de tres días, porque pueden producir congestión nasal de rebote. Si seguimos con congestión, sustituiremos el descongestivo tópico por uno oral (pseudoefedrina, fenilefrina).
Los descongestivos nasales que se administran por vía oral, pueden estar comercializados solos, o en combinación con un analgésico, ya que es común presentar dolor de cabeza por la congestión nasal. Además, esta analgésico nos puede ayudar a aliviar la fiebre, dolor y malestar producido por la gripe o resfriado. Antes de tomar un descongestivo por vía oral, si padecemos alguna enfermedad crónica o tomamos algún medicamento, deberemos consultar con nuestro farmacéutico.
Conjuntamente con el tratamiento antidescongestivo, es conveniente realizar limpiezas nasales con agua de mar.
A esta agua de mar se le retira gran cantidad de sodio (sal) mediante procedimientos químicos, para que puedan ser aprovechados los otros minerales que contiene. Entre estos se encuentran el cobre (desinfectante), manganeso (antialérgico) y sulfuro (desinflama la mucosa). Generalmente se comercializan en forma de spray, facilitando una limpieza de fosas y senos nasales más profunda. No producen efectos secundarios, por lo que pueden emplearse siempre que se necesiten y cuantas veces sea necesario, Además pueden emplearse con cualquier medicamento.
Otras medidas para respirar mejor son:
- Al dormir, mantener la cabeza algo elevada, con la ayuda de un cojín.
- Beber mucho líquido.
- Reducir la sequedad del ambiente con la ayuda de un humidificador.
- Respirar vahos de eucalipto, especialmente antes de acostarse.
- No fumar ni permanecer en ambientes con humo.
- Evitar el contacto con irritantes nasales (polvo, productos con olores fuertes, etc.).
Autor – Ruth Lucía Díaz Ramón